OBJETUAL: Caracas
Documentación de Convivencias

Convivencia 7
Consuelo Méndez
Del Jueves 21 al Domingo 24 de Febrero de 2008

Anotaciones

Caracas, 21 de Febrero. Luna llena. Anoche hubo un eclipse de luna y tarde en la noche la luna se puso muy roja. Hoy me entrega Jidu ( Renny Barrios) la almohada del proyecto de performance Objetual. Estoy a la expectativa y me llevo un morralito para recogerla en la GAN a las 6 p.m. Por tres días me toca estar con ella y ver lo que se me ocurre hacer. Por los momentos deseo bordarle una funda que ya tengo preparada. Además, quiero ponerle una cubierta de tela que la protegerá del manoseo acentuado que sufre como objeto viajero.
Bordar es una acción del trabajo de la espera en el que he estado involucrada últimamente. Le doy la bienvenida a la almohada viajera a mis espacios y la dejo llenarse de mis energías creativas. Viene cargada de otras energías desde su llegada hace varios días a Venezuela. Viene del sur de América por correo. Dependiendo de lo que vaya sintiendo, percibiendo, haciendo y pensando con ella surgirá la acción para el evento final. Estoy en el aire por ahora. ¿Y la almohada es un objeto de ensueño? Espero a ver.
Recibo la almohada de manos de Jidu. Aidana e Ignacio están presentes. Nos reunimos en la plaza de los museos y conversamos un rato. La almohada da asco! Híjole que malgastada y sucia está. No es para menos con los viajes que ha vivido. Me río de mí misma ante mi reacción. Creo que la voy a recubrir.

Caracas, 22 de Febrero, 2008. Hoy es viernes. Mi mamá cumple 16 años de fallecida. Le prendo una velita y la saludo temprano.
No es de gratis que tengo la almohada que cuidar. La pongo en diferentes lugares de mi casa y le tomo fotos. Mi acción consiste en cambiarla de sitios. Paso el día pensando como restaurarla sin que pierda su historia. Es un objeto demasiado frágil y viene de lejos: Chile, Brasil y ahora Venezuela. Le tomo fotos a los detalles, el sucio en la superficie, las heridas cosidas, su deformación de almohada alargada.
Salgo a comprar la tela para protegerla y recubrirla. Saco la máquina de coser y juego a la costurera con ella. La forro con una tela recién lavada. Le cambio un poco la forma y escondo su historia. Mi otra tarea es bordarle letras en negro a una funda blanca: la fecha, objetual, almohada. ¿ De dónde viene la almohada? Suena árabe la palabra. Esta almohada tiene olor, peso, textura de otros. Me quedo bordando.

Caracas, 23 de Febrero, 2008. Amanece lloviendo en mi casa. Es sábado. Despierto temprano y lo primero que veo es la almohada que me acompaña por tres días. Anoche le cambié su apariencia y escondí su historia. Ahora parece una almohada nueva. Su cuerpo interior lleva la huella de todo aquello que le ocurrió con otros. Mi relación con ella ha sido dulce. Durante el día la pongo en distintos lugares y le tomo fotos. El resto del día lo he pasado bordando la funda. Encuentro este texto: Almohada se compone del artículo al, tan presente en cientos de palabras de nuestra lengua. El resto de la expresión hace referencia a una de las partes más visibles de nuestro cuerpo: la mejilla, que es lo que apoyamos en la almohada. Esa parte de la cara en árabe hispánico y magrebí recibía el nombre de mujádda, por lo cual almohada significa precisamente “propio de la mejilla”. Bordo mas palabras y voy gastando el hilo negro que compré especialmente para este proyecto. Las puntadas marcan el tiempo. Bordar es una acción meditativa muy femenina. Cuando se borda aparecen las historias, los recuerdos, se jorunga la memoria. La almohada sirve de apoyo a la cabeza, estimula el sueño, permite el descanso. Debajo de la almohada dejamos los dientes de leche para que el ratoncito traiga monedas de regalo. “Pon una hoja tierna de la luna debajo de tu almohada y mirarás lo que quieras ver…..” recomienda el poeta Jaime Sabines.

Caracas, 24 de Febrero, 2008. Hoy domingo me voy temprano para Valencia con mis amigos artistas Ramses Larzábal, Doménica Aglialoro y Alberto Asprino. La almohada va conmigo en un morralito negro. Vamos a la exposición de Alberto en la Sala Braulio Salazar que casualmente se titula Ruta 2 y trata el viaje, el paisaje, la memoria y la instalación de objetos recogidos a través de mucho tiempo. Un espacio lleno de tesoros para la imaginación. De su catálogo le robo esta frase de Gastón Bachelard “El alma encuentra en un objeto el nido de su inmensidad.” Alberto me regala la magia hecha espacio. Me impresiona la muestra y me conmueve su humildad. Su sensibilidad mueve el alma desde la otra orilla.
No saco la almohada del carro pero la tengo muy presente. Me acompaña. Solo Ramses es cómplice de la acción.
El bordado de su funda está comenzado. La dejo en la casa. Creo que ella será el centro de la acción que pretendo presentar como mi aporte a la muestra colectiva de performance Objetual en la GAN.
En la noche al regresar a Caracas, le entrego la almohada a Aidana Rico. Este objeto almohada esconde su experiencia y sus olores dentro de su forro nuevo. Aidana dice con alegría “ Está casi nueva,” y la abraza. Me río con ella. A decir verdad esa es la tarea que me propuse con la almohada: limpiarla, renovarla.



Consuelo Méndez


OBJETUAL Santo Domingo (2008)
OBJETUAL Caracas (2008)
OBJETUAL Belo Horizonte (2006)